Fundada por los sacerdotes agustinos, Huamachuco se organiza alrededor de una inmensa plaza central, sobre la cual se encuentra una iglesia muy moderna. En las afueras de la ciudad, se pueden visitar las ruinas de las fortificaciones pre-incaicas llamadas Marcahuamachuco: 400 A.C., la civilización que vivió allí, aislada de las otras culturas circundantes, construyeron edificios circulares más o menos en la misma zona menos ancha, rodeada por muros relativamente altos. El interés de este sitio radica en su originalidad en comparación con otros sitios pre-incaicos de la región.